El candidato de IUCyL a la Presidencia de la Junta de Castilla y León, José Sarrión se ha reunido con una representación de la Plataforma de Asociaciones y Sindicatos de Bomberos Forestales –donde se encuentran representadas organizaciones como ATIFYL, CGT, TRAGSA, ATBRIF, INFOSA y CNT- para conocer la problemática del sector y sus propuestas de cara a las elecciones autonómicas de mayo de 2015.
Sarrión ha defendido y reclamado un giro radical de las políticas que el Partido Popular desarrolla en materia de prevención y extinción de incendios forestales. “Apostamos por la creación de un cuerpo profesional de bomberos forestales, dependientes directamente de la Junta” .
La propuesta, recogida en el programa autonómico de Izquierda Unida Castilla y León, pretende dignificar las condiciones de trabajo de las personas dedicadas al sector, así como la apuesta por un modelo de prevención anual muy alejado de la pasividad y la precariedad de las actuales políticas forestales de la Junta de Castilla y León.
Una profesionalización a la que las diferentes organizaciones pusieron cifras reales basando sus cálculos en cuestiones como el coste real de un cuerpo profesional y reconocido, el presupuesto de las BRIF, el número de víctimas mortales en incendios forestales, el coste por incendio y los reales decretos para paliar los devastadores incendios forestales. “Y las cifras dan la razón a sus reclamaciones” señala Sarrión, quien destaca la precariedad laboral en el sector, el fraude de ley en el que la Junta mantiene a las helitransportadas, las deficiencias de los EPIS y el trato vejatorio hacia todos los que se dedican a un sector que, pese a disponer de unas directrices europeas que instan a la acreditación como bombero forestal, sufre las pocas ganas de la Junta de Castilla y León.
A este respecto, el candidato de IUCyL a la Presidencia de la Comunidad, José Sarrión, critica la ruleta rusa de la Junta con nuestros montes y bosques, y la vida de muchas personas.
Por ello, IUCyL insta por un cambio radical, que pasa por unaplanificación anual en las campañas de prevención y extinción de incendios, dotación de personal suficiente y cualificado durante todo el año, así como el reconocimiento de la categoría profesional de bombero forestal.
Una propuesta que será recogida en el programa autonómico de Izquierda Unida, “cuyos pilares y ejes ya están definidos y que tiene como uno de ellos la dignificación de las condiciones de trabajo de las personas dedicadas a este sector así como la apuesta por un modelo de prevención anual muy alejado de la pasividad y la precariedad de las actuales políticas forestales de la Junta de Castilla y León y que tan graves consecuencias está teniendo para Ávila” señala José Alberto Novoa no sólo ante el incendio de Navarrevisca sino otros recientes en el Tiétar o el Barco de Ávila. “A las Elecciones Autonómicas esta formación concurrirá con un programa donde las condiciones de trabajo de aquellos que se juegan la vida en los incendios forestales en esta provincia se vean reconocidas como merecen” apunta Novoa.
Una profesionalización a la que las diferentes organizaciones pusieron cifras reales basando sus cálculos en cuestiones como el coste real de un cuerpo profesional y reconocido, el presupuesto de las BRIF, el número de víctimas mortales en incendios forestales, el coste por incendio y los reales decretos para paliar los devastadores incendios forestales. “Y las cifras dan la razón a sus reclamaciones” señala José Alberto Novoa tras una reunión en la que la plataforma trasladó su queja por la actual precariedad laboral en el sector, el fraude de ley en el que la Junta mantiene a las helitransportadas, las deficiencias de los EPIS así como lo que entienden como un trato vejatorio hacia todos los que se dedican a un sector que, pese a disponer de unas directrices europeas que instan a la acreditación como bombero forestal, sufre “las pocas ganas de la Junta de Castilla y León”.
A este respecto el coordinador provincial de Izquierda Unida de Ávila critica que la Junta de Castilla y León “juega a la ruleta rusa no sólo con nuestros montes y bosques, sino con la vida de muchas personas, que acuden de forma voluntaria ante la falta de efectivos para hacer frente a los incendios que se están produciendo estos días en nuestra provincia”. Voluntariedad y negocio. Porque no olvida José Alberto Novoa que “la extinción de incendios se ha convertido, desgraciadamente, en un negocio para algunos”.
Por ello desde Izquierda Unida se insta a una apuesta radical de cambio que pasa “inevitablemente” por “una planificación anual en las campañas de prevención y extinción de incendios, dotando las mismas del personal suficiente y cualificado durante todo el año” así como “el reconocimiento de una vez por todas de la categoría profesional de bombero forestal para los trabajadores de este sector, garantizándoles con ello la estabilidad profesional y una mayor seguridad y dignificación de sus puestos de trabajo”.
