El pasado 21 de mayo de 2015 el Parlamento europeo emitió un Parecer sobre el proyecto de explotación de una mina de uranio en Retortillo (Salamanca). En dicho documento, se expone que deben superarse diversas etapas para que la Comisión dé el visto bueno a la iniciativa, y recuerda la obligación del inversor –Berkeley Minera España S.L.- de facilitar información sobre las distintas fases superadas y su puesta en marcha.
El texto, en virtud del artículo 43 del Euratom, señala como fecha de inicio de la producción el año 2017, y “todavía carece de los permisos necesarios”. A este aspecto, la eurodiputada de IU, Marina Albiol, se cuestiona si la Comisión debería emitir un parecer supletorio “en relación con este proyecto”.
Asimismo, mediante pregunta con respuesta escrita, interroga si la Comisión es conocedora de la suspensión de los procedimientos de autorización de usos excepcional de suelo rústico y de la autorización de construcción de la planta de beneficio a la multinacional australiana Berkeley; en concreto, la empresa matriz en España.
Finalmente, IU recuerda las informaciones que vinculan el sentido del Parecer a la influencia de un amigo del Comisario Arias Cañete. “Existe una vinculación entre la empresa promotora y personas y empresas relacionadas con el escándalo URAMIN de la década pasada, pendiente de resolución judicial en Francia”. “¿Considera la Comisión que Berkeley Minera España S.L. es una empresa solvente, merecedora de la confianza depositada en el Parecer de 2015?”, concluye Albiol.